Quiero iniciar este blog hablando del nombre del proyecto. ¿Por qué espacio Luna? ¿Por qué Luna?

Pues la respuesta solo la tiene esa misteriosa y ensoñadora luna que tanto nos atrae. Allí está, reluciendo en el cielo nocturno como el primer día que el primer humano elevó la vista al firmamento nocturno y la vió brillar ante sus ojos. Y allí estaba yo, desde pequeña observando la luna y dejando volar mi imaginación motivada por su encanto.

Sabemos que en muchas culturas adoraban a la luna como si de un dios se tratara. Y es que la luna influye sobre la tierra, los océanos y todos sus pobladores, en especial sobre las mujeres, pues en muchos pueblos la luna representa la luz femenina. Y, aunque recibe diferentes nombres según diferentes civilizaciones, la luna es, principalmente, la diosa madre, símbolo de la fecundidad y de la maternidad. De ahí, ESPACIO LUNA.

Sabemos que las civilizaciones se han transformado adquiriendo conocimientos científicos y tecnológicos, pero ella sigue ahí tan mágica y grande, por eso las voces de los mitos no se han silenciado del todo y la influencia de la luna persiste en cierto modo en el colectivo de la mujer. Aristóteles ya decía que la luna es femenina porque la menstruación de las mujeres y la mengua de la luna ocurren al mismo tiempo.

Si nos basamos en tiempos del paleolítico, sabemos que un artista primitivo esculpió en la localidad francesa de Dordoña, la estatuilla la Dama del Cuerno o Venus de Laussel. Muestra a una mujer que sostiene en una mano un cuerno de bisonte con trece muescas mientras que su otra mano reposa sobre el útero, en un avanzado estado de gestación. Muchos historiadores ven en esta estatuilla una especie de calendario relacionado con el ciclo menstrual.

Por ello, y gracias a nuestros antepasados sabemos que el ritmo natural de toda mujer era menstruar bajo la luna nueva y ovular bajo luna llena, donde la única forma de marcar el tiempo era mediante la observación de las fases lunares. En la menstruación las fases de la luna coinciden con las fases del ciclo menstrual, la luna tarda alrededor de 28 días en da una vuelta completa a la tierra, el ciclo de la mujer es de 28 días aproximadamente. Por ello, nuestros ciclos se conectan al igual que las cuatro fases lunares:

• La menstruación en la luna nueva. Invierno. En esta fase la mujer se puede fiar más de su instinto e intuición. Es un momento propicio para guardar silencio, quietud y meditar.
• Pre-ovulación en cuarto creciente. Primavera. Es la renovación, con un aumento en la energía física. Las emociones están más estables y la energía vital está en su punto máximo.
• La ovulación en luna llena. Verano. Es una fase fértil en todos los aspectos: para dar vida a proyectos laborales, personales, familiares… En estos días,la seguridad en sí misma y la autoestima se incrementan.
• Premenstruación en luna menguante. Otoño. hay una orientación “hacia el interior”. También disminuye la capacidad de concentración y la memoria.
• En la menopausia: aunque no haya menstruación, los ciclos siguen existiendo.

En la actualidad el ritmo de vida, la luz artificial, el uso constante de pantallas hace que el ritmo natural femenino se confunda, haya ciclos irregulares y se sangre bajo luna llena u otra luna que no sea la nueva.

Sabemos que cuando la mujer se hace consciente y conoce sus ciclos puede gestionar mejor sus emociones, su actividad y su vida en armonía con sus propios procesos naturales.

¿Influye la luna en el parto?

Como he mencionado el ciclo menstrual de la mujer al igual que el de la luna es de 28 días aproximadamente, eso puede tener una relación entre la ovulación (en la luna llena) y la menstruación (en la luna nueva) comenzando 9 ciclos lunares después, siempre en luna llena. Pero los científicos insisten una y otra vez en que la luna no influye en el nacimiento de un bebé. Y las mujeres seguimos pensando que sí, que hay cosas que no necesitan probarse. La creencia popular apoya la idea de que la luna sí influye en el parto. Muchas matronas se suman a esa creencia y defienden con datos que han ido anotando a partir de su propia experiencia. 

“Luna y mujer son iguales. Ambas son femeninas, cíclicas y dadoras de la vida”